El único y verdadero camino.

El tiempo cuera, o al menos eso dicen.
Hay que aprender de esta vida, que todo tiene una solución, aunque algunas, costará esfuerzo conseguirlas.
Pero debes pensar en todo lo que hagas para evitar arrepentirte después.
Porque desgraciadamente el tiempo no vuelve nunca.
Nada dura para siempre, todo es efímero.
Y hay oportunidades únicas, por eso, hay que tener cuidado con cual escoges, porque puede cambiar tu vida en un segundo.
Y ya se sabe que solo hay un camino, la verdad. Y que antes o después, acaba saliendo.
No hay nada con lo que tapar la verdad, por mucho que lo intentes es imposible.

Solo ellos lo entienden.

Tal vez quien lea estas líneas no entiendan de donde han salido estas palabras, o como han sido escritas.
No importa, lo que importa es que lo acepten.
Importa que sepan lo que siento y que me respeten.
Cada uno tiene sus propios gustos, la mayoría son falsas copias de los demás, copias sin personalidad.
Vivimos en un mundo en el que las personas parecen ser moldes exactos.
Tal vez por eso, destaque demasiado lo diferente, lo que no se ve mucho...
Entiendo que sea difícil de entender los gustos diferentes, estamos acostumbrados a ver siempre lo mismo.
Pero al fin y al cabo, solo las personas que más te quieren lo entenderán.
Y eso solo lo puedes comprobar con el tiempo.
Al nacer escogí un camino, un sentimiento y una forma de expresarlo.
Un sentimiento que se vive los 365 días del año, pero solo es una semana en la que se viven intensamente.
Un sentimiento que te hace ilusionarte por conocer gente que sientan lo mismo, y que crean nuevos sentimientos fuera de tu lugar.
Un sentimiento que hace que te propongas unas metas para cumplir, y que lo desees con todas tus fuerzas e imaginar en pasar esa línea de meta.
Y mi línea de meta, ya está Cumplida.

Y ahora puedo disfrutarlo con los que mas quiero.
Si eres uno de ellos, sabrás de lo que hablo.

Más que un sentimiento.

Muchos pensarán que estoy loco... que es demasiado exagerado lo que siento en este tiempo... pero es así.
Es algo que no se puede remediar, que se lleva por dentro...
Todo un año esperándote.
Contando día a día las horas que faltaban para verte de nuevo, para oler el incienso, para poder volver a sentirte entre mis manos...
Doy gracias por esa semana tan especial que solo se repite una vez al año y que tantos vivimos con esa ilusión única...
Una semana para disfrutar, para emocionarse, para entregarte a una imagen...
Y es que te has pasado tan rápida... ¿Qué vamos a hacer ahora sin ti?
Solo nos queda vivir de los recuerdos de esta Semana Santa maravillosa en la que mas de un cofrade hemos llorado de moción..
Gracias, gracias al tiempo que nos dejó salir... y gracias también porque me he dado cuenta de que en tan solo en una Semana, puede nacer algo nuevo y cambiar muchas cosas...
No me importa esperar otro año más, ya que, al fin y al cabo, para volver a verte, solo me hace falta, cerrar los ojos....

Esto no es para Siempre...

Aquel día en el que él se fue...
Se fue sin avisar, sin decir nada, de repente...
Cuando nos avisaron de que se había marchado, no importó donde estuviésemos, cuanto tardaríamos en llegar... Sin apenas decir nada, fuimos para el sur.
Allí, bueno, pues que decirte de lo que había... Lo único que vi era silencio... silencio por la pérdida...
Yo lo ví, porque no me lo creía... y justo en el instante en el que mis ojos lo vieron, me di cuenta de que era verdad y que la vida puede irse en cualquier momento, sin avisar, sin darte tiempo de que te despidas...
Por eso, creo que debemos vivirla al máximo.
Y a tí, tio, todos sabemos que estás viéndonos desde allí arriba...y quiero decirte que no te preocupes, que entre todos cuidaremos a tu familia pase el tiempo que pase... que siempre tendremos en nuestra memoria los momentos que pasamos contigo, que todos quisimos despedirnos aunque no todos pudieron...
Algún día, volveremos a vernos, no te precupes...
Protégenos...
Ya sabes que aquí, todos te queremos y nadie te olvida.